Sin problema. Sin ceder un set. Rafael Nadal jugará mañana, por undécima vez, los octavos de final del Abierto de Australia, después de deshacerse del tenista bosnio Damir Dzumhur por 6-1, 6-3 y 6-1. El número 1 mundial, campeón del torneo en el 2009 y finalista en el 2012, 2014 y 2017, se siente a punto para afrontar la semana decisiva por el título en Melbourne Park, en la que también se colaron ayer Pablo Carreño y Carla Suárez, y podría acompañarles aún Albert Ramos hoy, aunque al catalán le espera en la pista un tal Novak Djokovic.

Dzumhur (30º mundial) era una prueba más para el tenista mallorquín y la superó con nota. Ni una duda. Nadal salió dispuesto a imponer su ritmo desde el primer punto y sin ningún tipo de concesión. En 17 minutos estaba 5-0 y solo había perdido tres puntos. En la segunda manga, Dzumhur buscó ser más agresivo para contrarrestar la efectividad de Nadal y, lo consiguió por un momento. Rompió por primera vez el servicio del español (2-2). Un espejismo. El número 1 mantuvo la presión y se repuso arrebatando el saque del tenista bosnio en dos ocasiones más para cerrar la manga en 43 minutos. Imparable. El tercer set fue otro paseo. Nadal cedió solo un juego más y remató la faena con un ace final. La victoria número 55 en Melbourne y la 550 en un partido de pista rápida.

Nadal se enfrentará en octavos de final el domingo al argentino Diego Schwartzman, que venció al ucraniano Alexandr Dolgopolov por 6-7 (1-7), 6-2, 6-3 y 6-3. Pablo Carreño se impuso a Gilles Muller por 7-6 (7-4), 4-6, 7-5 y 7-5, tras una batalla de 3 horas y 18 minutos. Carla Suárez completó el pleno español tras eliminar a la tenista estonia Kaia Kanepi (6-3, 1-6, 6-3).