Fue, sin duda, una curiosa y muy, muy, sentimental conferencia de prensa del Gran Premio de Valencia, última cita del calendario motociclístico en el que, como sucede a menudo, se decidirá el ganador del Mundial de MotoGP, el título más prestigioso de todos. En la mesa, estaban lo más importantes pilotos: Jorge Lorenzo, Valentino Rossi, Dani Pedrosa, Marc Márquez, Johann Zarco y, como no, Andrea Dovizioso.

Y todos, claro, opinaron que Márquez, con 21 puntos de ventaja y teniendo que acabar entre los 11 primero el domingo, es el gran favorito para ganar el título, el cuarto en cinco años. Y "solo un milagro", que, a veces, ocurren en las carreras, podría hacer que Dovi fuese el nuevo y flamante campeón. Y alguien, en medio de la batalla de preguntas y tras el homenaje de todo el mundo a su locutor y speaker más carismático, el británico Nick Harris, le preguntó a Rossi si piensa o no seguir en activo tras cumplir su contrato con Yamaha en 2018. "No me empecéis a tocar los cojones con mi renovación", dijo entre risas, casi carcahadas, el Doctor.

Rossi, como el resto de estrellas de MotoGP, acaban contrato a finales de la próxima temporada

Lo cierto es que, la próxima temporada, habrá revuelo nada más iniciado el Mundial. Y no solo por las Ducati de Jorge Lorenzo y Andrea Dovizioso volverán a estar en la pomada; o porque habrá que ver si Yamaha acierta o no con la nueva moto para Maverick Viñales y el propio Rossi; o si, definitivamente, la firma de los diapasones le ofrece una tercera moto oficial al rookie de esta temporada, el francés Johann Zarco; o si, finalmente, Honda es capaz de darle, ya de principio de campaña, una máquina competitiva a Marc Márquez. Nada de todo eso será tan importante como ver cómo se mueve el mercado de pilotos, ya que todos, todos, desde Márquez hasta Zarco acaban contrato, pues todos, todos, se pusieron de acuerdo, sin hablarlo, en renovar solo dos años en el 2016.

Y, visto que este año Rossi solo ha ganado en Assen (Holanda) y logrado, de momento, cinco podios en 17 carreras, fueron varios los periodistas italianos que quisieron saber si el Doctor está pensando ya en su renovación o cuales son sus planes de futuro. Y fue entonces cuando Vale soltó lo de "no me empecéis a tocar los cojones con mi renovación" y añadió: "No sé que haré. Este año hemos tenido muchos problemas con la moto, con los neumáticos, está siendo una temporada muy difícil y, sí, desde hace ya varias carreras estoy pensando ya más en la moto del próximo año, en ayudar a nuestros ingenieros a saber qué camino coger que en los resultados. Así que, de momento, dejarme ver como empiezo el 2018, como me va la pretemporada y las primeras carreras, y decidiré si añado o no más años a mi vida deportiva".

Los productos del 46, el gran negocio de Rossi

Eso sí, todo parece indicar, que no tan solo por el negocio, por los muchos millones de euros que están en juego, no tanto en contratos, que también o premios, sino, sobre todo, en mercadotecnia pues el grueso de los ingresos de Rossi ha sido siempre, y más ahora, la venta de todo tipo de productos relaciones con el VR46 y la fiebre amarilla que le persigue a lo largo del Mundial. "Hagamos un pacto --terminó diciéndole Rossi a sus colegas periodistas--, vosotros non rompetemi i coglioni y yo, en cuanto haya decidido si sigo o no, os lo cuento de inmediato".