La cuestión estética es muy opinable en el fútbol y resulta evidente que al Real Zaragoza le queda mucho por crecer en su juego, aunque otro debate sería si tiene mimbres o no para hacerlo, pero en todo caso los resultados admiten poca o ninguna discusión. Y el equipo los está consiguiendo. Catorce puntos de los últimos 18 y ni una derrota en las últimas seis jornadas le han colocado como el bloque más en forma de Segunda en el último mes y medio y a los pies de unas plazas de promoción que pisará si gana hoy en Alcorcón, un campo donde nunca ha vencido, por cierto, después del empate de ayer entre la Ponferradina y la UD Las Palmas.

El curso pasado al Zaragoza le costó llegar a esas plazas hasta enero, en la vigésima jornada, y no tardó en bajarse de ahí para no subirse nunca más. Este año lo puede hacer mucho antes, señal clara de que las cosas van mucho mejor que la temporada pasada, empezando porque ya no está Agapito Iglesias, lo que ya es una liberación de por sí para todos, plantilla y afición. Y también van mejor porque el equipo tiene más gol, más pegada, necesita muy poco para marcar. Fabrica gramos de fútbol, pero con ellos es suficiente para derribar el muro enemigo, normalmente con goles de bella factura y sujetados en la efectividad de Borja Bastón, que con seis dianas ya ha gritado a los cuatro vientos que va a ser la referencia anotadora de este Zaragoza.

A Borja le ayuda mucho Willian José. De hecho, juntarlos a los dos ha sido la mejor apuesta de Víctor, que se ha empecinado en otras cosas, a veces hasta el error. La duda hoy es si mantendrá a Javi Álamo o le dará paso a Jaime, que se ha ganado un sitio. Por lo que ha dicho el técnico, se diría que no lo hará. Diogo también puede relevar al irregular Fernández, otra decisión por tomar, en este partido o para el futuro muy inmediato. Vuelve tras su sanción Galarreta, que ha dado poco, pero sí suficiente para saber que es el único que le puede hacer fabricar algo de fútbol al equipo, que también vive mucho de la inspiración de Eldin, la otra sensación de este arranque de curso junto a Borja.

DOS DUDAS Al Zaragoza, por el momento, no le ha afectado en el césped ni el largo conflicto con Hacienda ni la investigación por el presunto amaño del partido ante el Levante, buena señal, porque habla de la fuerte consistencia del grupo, que también pareció mejorar en defensa y estuvo tres encuentros sin encajar, pero que en los dos últimos partidos ha dado más dudas, sobre todo por el flanco de Rubén, que seguirá en el eje pese a una tarde calamitosa ante el Racing.