No fue ayer un buen día para el Real Zaragoza, que a solo seis jornadas para finalizar la Liga se queda a siete puntos de la línea de salvación. Antes estaba a cuatro. El Zaragoza no pudo sumar un resultado positivo en el estadio Sánchez Pizjuán, pero, además, con antelación el Villarreal, que era y sigue siendo su rival más cercano en la clasificación, había ganado forma agónica al Málaga (2-1).

El submarino amarillo iba perdiendo en el minuto 83, pero entonces Kameni, portero del cuadro malacitano, hizo un penalti y fue expulsado. Marcos Senna aprovechó la pena máxima para empatar y luego, Hernán Pérez, en el tiempo añadido (m.94), marcó el gol del triunfo para los levantinos. Esto obligaba al Real Zaragoza a ganar en el campo del Sevilla, pero no tuvo ninguna opción.

18 puntos en juego

Quedan 18 puntos en juego y eso todavía concede al Zaragoza alguna posibilidad para alcanzar la permanencia, pero para que pueda lograr al final ese objetivo quizás tengan que ganar cinco de los seis partidos que restan por disputarse. Por tanto, su margen de error, es casi inexistente. La única ventaja es que cuatro de esos seis encuentros son en La Romareda.

La primera finalísima se encuentra ya a la vuelta de la esquina. Será el domingo contra el Granada, que supera ahora por ocho puntos en la tabla al Real Zaragoza. Esta vez solo le valdrá ganar para seguir con vida. Pero si pierde estará virtualmente descendido.