El Real Valladolid venció, en un partido que dominó, llevado en volandas por un estadio con la mejor entrada de la temporada, pero dio vida a un Sporting de Gijón que aprovechó un fallo de la defensa local para llevarse un gol de cara al choque de vuelta.

Calero adelantó a los blanquivioletas al aprovechar un servicio de Hervías y, cinco minutos después, el extremo clavó otra falta en la escuadra. Sin descanso y con los rojiblancos noqueados, Calavera en propia puerta dejó muy cuesta arriba la eliminatoria para el Sporting. En la segunda mitad, aprovechando una contra y un error de Javi Moyano en el corte, Jony dejó a los asturianos con un hilo de vida para la vuelta.

Fue un gol de oro que daba vida al Sporting de Gijón y convertía al Real Valladolid en un manojo de nervios, lo que se tradujo en fallos defensivos que, sin embargo, no llegaron a transformarse en oportunidades para los rojiblancos, por lo que el encuentro finalizó con el 3-1.