Jorge Cyterszpiler, el primer representante de Diego Maradona, no quiso vivir más del pasado ni tampoco su presente. Se lanzó del séptimo piso de un lujoso hotel de Buenos Aires y murió a los 58 años.

La Policía encontró su cuerpo totalmente desfigurado. El rengo, como le decían, fue el hombre que inventó en Argentina el oficio de representante de jugadores que hoy hacen centenares de personas con el sueño de salvarse con el descubrimiento de alguna perla. Primero fue amigo de Diego y después el que llevó adelante sus negocios hasta que terminó de repente su relación.

Pero antes de decirse adiós y casi no hablar más, Cyterszpiler y Diego se decían a sí mismos hermanos. El primero apenas le llevaba dos años. Juntos transitaron ese irrepetible puente que va del barrio a la gloria. Cyterszpiler provenía de una acomodada familia de origen polaco. Vivía en La Paternal, un barrio cercano al estadio de Argentinos.

Cuando Maradona se convirtió en el emblema de Los Cebollitas, un deslumbrante equipo infantil, se hicieron muy amigos. Y esa relación se fortaleció cuando la directiva de Argentinos Juniors decidió que su joya dejara de vivir en una chabola de Villa Fiorito y se mudara a La Paternal, cerca de los Cyterszpiler. A principios de 1977, y después de debutar en la selección ante Hungría (4-0), Maradona pidió a Jorge que fuera su representante. Aún no había cumplido los 18 años. Le faltaba experiencia, pero no astucia. Cyterszpiler logró un contrato excepcional. Único.

El exsargento Próspero Consoli, que manejaba el club, se encontró con un apoderado resuelto a defender los intereses del jugador y que formó a su alrededor un pequeño imperio: Maradona Producciones. La sociedad negoció la imagen del jugador y suscribió millonarios contratos. En medio de ese vertiginoso crecimiento llegó el pase a Boca Juniors, en 1981, por 4 millones de dólares. Se quedó un año. El traspaso al Barcelona se hizo el 4 de junio de 1982. Argentinos recibió casi 5,9 millones y Boca 2,3 millones. Los tres años de contrato de Maradona costaron 5,5 millones.

Barcelona se desprendió de Maradona en 1984. En Nápoles pasó algo que ambos prefirieron callar y se separaron. La sociedad Maradona Producciones se disolvió. El lugar de Cyterszpiler lo ocupó por muchos años Guillermo Coppola. La figura cansina del primer apoderado fue saliendo de escena. Su nombre ha vuelto ahora a las primeras planas de la manera más inesperada.