A la vista de que a la hora del comienzo del entrenamiento de ayer todavía faltaban por regresar a la disciplina del grupo cuatro jugadores (Dujmovic, Obradovic, Da Silva y Barrera), Jiménez decidió retrasar un día más la reunión que anunció que tendría con la plantilla. A nadie cogerán de sorpresa, ya que el técnico expuso su postura públicamente e incluso conversó con los jugadores que no se marcharon. El técnico andaluz, tras el bochornoso episodio de Málaga que concluyó con sus duras palabras, recordará a la plantilla que debe defender con dignidad la camiseta del Zaragoza y que no se puede volver a repetir lo de La Rosaleda.