El Iberostar Tenerife se impuso por 81-69 al Tecnyconta Zaragoza después de funcionar como un rodillo en los dos últimos cuartos, con lo que se sobrepuso a un mal inicio de partido; todo lo contrario que el conjunto aragonés, que protagonizó un inicio de partido excepcional, pero agotó su pólvora antes del descanso.

El Tecnyconta quería olvidar la mala imagen de su primer partido y por ello tuvo un arranque explosivo, con una defensa sólida y un ataque efectivo (2-11 en 5 minutos). De Jong, Barreiro y Michalak jugaban con fluidez y lideraban al Tecnyconta. El castigo para los canarios al final del cuarto fue de 10-23.

Pero acabó ahí. El Tenerife se metió en el partido y el Tecnyconta evidenció sus nervios. El protagonista del equipo fue el bosnio Vrabac, que anotó siete puntos consecutivos antes del descanso para colocar a su equipo (42-38).

El Tenerife ya no dejó de ir por delante. Mantuvo un ritmo alto al que el Tecnyconta no pudo responder (65-60 al final del tercer cuarto). En cuanto sus errores en el lanzamiento se multiplicaron, ya no tuvo opciones.