La constancia y el trabajo siempre tienen su premio. Y esta vez Toni Abadía tuvo su justa recompensa. El atleta del Nike logró la mínima de asistencia de los 5.000 metros lisos a los Juegos Olímpicos en la tarde de ayer en el Mitin de Hengelo. El corredor zaragozano firmó unos sensacionales 13.12.68, lo que supone un nuevo récord de Aragón, pasando a mejor vida los 13.16 con los que Roberto García acabó en Anoeta el 2004.

"Tengo pie y medio en los Juegos Olímpicos. Aunque todavía no es seguro", afirmaba satisfecho tras la carrera el mediofondista zaragozano. Todo se decidirá en el Nacional que se celebra en Gijón. Este año ningún otro español ha realizado la marca exigida. "Ahora el Campeonato de España lo afrontaré de otra manera. Ir a Asturias con la mínima debajo del brazo se nota", explicaba el corredor. Hace algo más de un mes se quedó a siete segundos de la marca en el Trofeo Ibérico de Gran Fondo celebrado en Maia. Terminó en 28.07. "Ahora ya me he quitado la presión de encima. No sé si disputaré algún 10.000 lisos, pero lo que sí es seguro es que correré el 5.000 en los Europeos de Amsterdam. Creo que será más un no disputar otro 10.000, que un sí. Lo decidiré con Pepe Mareca. Pero tengo el tobillo tocado y no quiero forzar más de lo necesario", apuntaba desde Holanda el atleta aragonés.

La prueba tuvo varias liebres y la ganó el etíope Dejen Gebremeskel con un registro de 13.00.98. "Hizo un día raro. Han caído cuatro gotas, pero las condiciones climatológicas han sido espectaculares. Fue una carrera en progresión. He pasado el mil en 2.14, el dosmil en 5.20 y el tresmil en 7.56".

PRIMER MIL

Fue desde el primer kilómetro cuando Abadía se dio cuenta que tenía la mínima en el bolsillo. Acabó el último dosmil en un crono de 5.16. "Ha habido momentos claves en los que el cuerpo me decía basta y he tenido que sufrir. Pero tras acabar he olvidado los malos momentos del año pasado en los que perseguí el crono sin suerte en Roma, Nueva York, Lausana y Mataró", apuntaba Abadía. Fue el primer europeo de la carrera ganando al esprint a un atleta británico que perdió una de sus zapatillas a una vuelta del final.