Villarreal y Espanyol firmaron un empate sin goles en El Madrigal, con el que los amarillos se agarran a la permanencia, quedándose cuatro puntos por encima del descenso, mientras que los catalanes se sitúan a dos puntos de Europa League y a seis de la Champions. Ambos conjuntos notaron las ausencias en ataque de dos de sus hombres más decisivos, Nilmar en el cuadro amarillo y Coutinho en el espanyolista, habiéndose resentido éste último en el calentamiento previo al encuentro.

En la primera parte el Espanyol gozó de las mejores ocasiones gracias a las internadas de Weiss por la izquierda y el ímpetu de Uche, aunque fue el Villarreal quien pudo adelantarse de no ser por un tanto anulado por falta sobre Kiko Casilla. Tras el descanso, el choque aumentó en intensidad, aunque nadie conseguía abrir el marcador. Poco después de la hora de juego Borja Valero cayó derribado por Forlín y los locales pidieron penalti.

Poco después los periquitos vieron como les anulaban un gol tras saque de esquina por falta sobre Diego López. Apenas un minuto más tarde tampoco subió al marcador un cabezazo de Marco Rubén en fuera de juego. De ahí al final, ambos equipos apretaron en busca de una victoria importante para sus intereses con poca claridad y acierto en los metros finales, lo que desembocó en el empate a cero final.