El Real Zaragoza aún no ha pedido la baja de Wilk para poder inscribir a un jugador --contaría con alrededor de 130.000 euros para ello-- y la decisión final está pendiente de una reunión en el club una vez que Narcís Juliá regrese de un viaje. Eso será esta misma semana, pero el deseo de Milla y la intención del director deportivo es la de buscar ahora ese refuerzo en la medular, un centrocampista ofensivo que suponga mayor talento para el equipo, aunque en el club no se tiene tan claro.

La búsqueda se va a centrar en un jugador de un equipo de Primera División que llegue cedido, aunque no es sencillo a estas alturas de curso, y que ante todo suponga un factor diferencial en la plantilla. No se va a traer por traer y no desde luego a un jugador que llegue solo para completar fondo de armario. Para eso, se esperará a enero y se apostará por jugadores del filial, sobre todo por Pombo. Así, es meS. V. ZARAGOZA nos probable que ese refuerzo llegue del mercado del paro, aunque el club va a estudiar todas las posibilidades.

Milla tenía en David López a su candidato para reforzar el equipo tras haber coincidido en el Lugo en la temporada pasada. Ya pretendió su fichaje al final del mercado estival y retiteró su petición nada más conocerse la gravedad de la lesión de Wilk. El centrocampista, en contacto directo tanto con el entrenador como sin sus colaboradores, esperó unos días más y la oferta zaragocista no llegó a producirse, solo un diálogo que dejó patente que desde el club no había un convencimiento absoluto de ese fichaje. Por eso, el pasado viernes por la ma- ñana dio el sí al Huesca, para fichar por dos temporadas por el club oscense.

Una vez que el club dé la baja a Wilk dispone de 20 días hábiles para inscribir la nueva incorporación, aunque lo lógico es cuando se solicite esa autorización a la Liga ya se tenga el refuerzo fichado.