La fiscalía de Múnich (sur de Alemania) acusó ayer al expresidente de Seat y Volkswagen y exdirectivo de BMW Bernd Pischetsrieder de evadir 243.000 euros en el pago de impuestos al fisco de Alemania. El fiscal argumentó que Pischetsrieder evadió esta cantidad manipulando sus declaraciones entre los años 2000 y 2003 y alterando los ingresos por alquiler de tres inmuebles de su propiedad.

Pischetsrieder, de 63 años, presidió Seat del 2000 al 2002, cuando fue nombrado máximo directivo del grupo Volkswagen hasta el 2006, de quien sigue percibiendo un salario millonario. Según la prensa alemana, Pischetsrieder ha admitido los hechos que se le imputan. Está previsto que el proceso tenga una duración de solo dos días, de forma que el veredicto del juez podría hacerse público hoy mismo.