Asaja denunció ayer que los ganaderos están sufriendo una disminución de los precios de la leche que entregan a las centrales lecheras, debido a la importación de leche de Francia. Según denuncia Asaja, la leche del país vecino se paga a precios de entre 0,24 a 0,26 euros por litro, puesta en planta, lo que hace que los ganaderos aragoneses "se vean forzados" a vender a estos precios, que son "doce céntimos inferiores al que debería ser".

Desde Asaja achacan esta situación a que "en Francia y Alemania se ha incrementado la producción estos dos últimos años de un 8 a un 10% lo que equivaldría una subida en España de un 35 a un 40%". Esto hace que exista una "saturación de producto cuando el consumo no solo se encuentra estabilizado sino que va disminuyendo", precisan en un comunicado. Desde Asaja recuerdan que los costes de alimentación de la vacas de leche han crecido un 35% en los dos últimos años.