La Asociación de Trabajadores Autónomos (ATA) y la Condeferación de la Pequeña y Mediana Empresa (Cepyme) han decidido unir fuerzas en Aragón. Ambas organizaciones territoriales firmarán mañana una alianza estratégica con la que pretenden «tener más voz» en la comunidad y reforzar la defensa de pymes y autónomos frente a las instituciones. Este acuerdo de colaboración es pionero en toda España y, por el momento, no se ha alcanzado en ninguna comunidad autónoma.

La alianza, con todo, no supondrá la integración de ATA Aragón en Cepyme, ya que ambas mantendrán su independencia y sus respectivas sedes, si bien la federación de autónomos no descarta trasladarse en un futuro al edificio de la plaza Roma.

El acuerdo de colaboración, que fue aprobado recientemente por las juntas directivas de las dos organizaciones, se firmará mañana en la sede zaragozana de Cepyme en un acto al que asistirán la presidenta de ATA Aragón, Mayte Mazuelas, su homólogo en Cepyme, Aurelio López de Hita, el máximo responsable de ATA en España, Lorenzo Amor, y la consejera de Economía y Empleo del Ejecutivo autonómico, Marta Gastón.

«Tanto Cepyme como nosotros tenemos la misma forma de ver las cosas; creemos que la unión hace la fuerza y que trabajando bajo un mismo paraguas podremos defender más y mejor los intereses de los pequeños empresarios y de los autónomos», subraya Mazuelas, que apunta que la alianza no afectará el funcionamiento interno de cada organización. Eso sí, la presidenta de ATA Aragón no descarta que en un futuro ambas entidades envíen sus comunicados de forma conjunta.

NUEVA LEY DE AUTÓNOMOS / La firma del acuerdo llega solo unos días después de que entrara en vigor, tras su publicación en el BOE, la nueva ley de autónomos. En este sentido, Mazuelas se mostró «muy satisfecha» con una normativa que, entre otras cosas, va a permitir la ampliación de la tarifa plana de 50 euros a un año para los nuevos autónomos o la reducción de los cargos por el retraso en los pagos a la Seguridad Social. La nueva ley también posibilitará que ATA participe en las negociaciones del diálogo social, algo que la asociación en Aragón había criticado de forma recurrente en la comunidad.