Adiós a los caramelos y esperanza por el chocolate. La histórica fábrica de dulces de Ateca, la antigua Hueso, se desprenderá definitivamente de la producción de las grajeas de la marca Respiral (las de menta son las más populares). La multinacional Mondelez (Kraft), propietaria de esta factoría de 107 trabajadores, confirmó ayer que trasladará a su centro de Valladolid este producto, al igual que el envasado de chicles Trident. Estas golosinas no están dentro del negocio que la compañía estudia vender, que se circunscribe a la actividad del chocolate, es decir, fundamentalmente los Huesitos. Estas famosas barritas son por tanto la única tabla de salvación que le queda a la planta.

La compañía comunicó ayer al comité de empresa que prorrogará durante un mínimo de cuatro semanas la interrupción temporal de las conversaciones iniciadas tras el anuncio de cierre de la fábrica atecana, que se hizo público el 26 de abril. Tras recibir varias "expresiones de interés" por la compra de la planta, Mondelez ya suspendió a mediados de mayo el proceso para el cese ordenado de esta instalación, que llevaría consigo un ERE de extinción para toda la plantilla.

Un mes después, las negociación con los posibles compradores --cuyo número no se concreta-- "se encuentran todavía en fase preliminar", apuntó ayer la multinacional estadounidense en un comunicado. Por ello, agregó Mondelez, "es necesario disponer de un tiempo adicional para determinar si alguna de ellas se puede concretar en una propuesta sólida de adquisición".

La parte amarga de la prórroga de estas negociaciones es que se excluye de las mismas la producción de caramelos Respiral y el envasado de chicles Trident, que representa aproximadamente la mitad de la fábrica de Ateca. Así, aunque se llegue a completar una transacción, esta implicaría el traslado de estos productos al factoría que Mondelez tiene en Valladolid.

AL CONGRESO

Por este motivo, la noticia de la prórroga ha sido recibida "con un sabor agridulce" por el comité de empresa, según el presidente del mismo, Ignacio Sánchez. "Por una parte es positiva, porque la amenaza de cierre parece que se aleja, pero, por otra, podemos perder una parte importante de la actividad", señaló. Los trabajadores celebraron ayer una asamblea para analizar estas novedades y estudiar si continúan adelante con las movilizaciones en defensa de la planta.

Precisamente mañana los miembros del comité acudirán a Madrid, al Congreso de los Diputados, donde seguirán desde la tribuna del público el pleno de la cámara donde el Gobierno deberá responder a la pregunta sobre el futuro de la fábrica atecana formulada por el diputado de CHA, Chesús Yuste. Aprovecharán también el viaje para entregar en la sede de Mondelez las 32.000 firmas contra el cierre que han reunido.