El BBVA ganó 709 millones de euros en el primer trimestre, un 53,8% menos que un año antes. La caída es tan abultada porque en el mismo periodo del año pasado obtuvo unos ingresos extraordinarios de 583 millones por la venta de parte de su participación en el banco chino CNCB. Eliminado ese efecto para hacer una comparación más homogénea, el beneficio hubiera caído un 11,6% por la depreciación de las divisas de algunos países donde opera y el menor resultado por operaciones financieras por los problemas en los mercados de capitales.

En una nota, su consejero delegado, Carlos Torres Vila, destacó la "fortaleza" del capital, la evolución de los ingresos recurrentes, la contribución de los mercados emergentes y los menores saneamientos en España. "Esta tendencia, junto al efecto estacional en la actividad bancaria, indica que los resultados irán de menos a más a lo largo del 2016", aseguró.

Los ingresos más puramente bancarios, medidos por el margen de intereses, crecieron el 13,3%, hasta los 4.152 millones, si bien se debió en parte a la incorporación del banco turco Garanti a las cuentas del grupo en julio del año pasado. Sin ese efecto (si hubiera estado integrado desde enero del 2015) habrían caído un 3,3%. La consolidación de esa entidad en las cuentas también hace que el margen bruto (ingresos bancarios más comisiones y resultados de operaciones financieras) mejore el 2,8% en lugar de caer el 9,3%.

Los costes crecieron un 14,4%, debido a la incorporación de Garanti, de Catalunya Caixa en abril del 2015 y los gastos de integración asociados, la elevada inflación en determinadas geografías, la evolución de las divisas y los planes de inversión en marcha en mercados en crecimiento. El ratio de eficiencia (relación entre ingresos y costes) se situó en el 54,8%, "mejor que la media de los principales competidores europeos en 2015 (68,1%)". El margen neto, en consecuencia, cayó el 8,5% (20,3% sin Garanti). Las menores provisiones para posibles pérdidas hicieron que el beneficio antes de impuestos bajase menos, un 7,2% (24,2% sin Garanti).

La tasa de mora, por su parte, cayó ligeramente al 5,3%, una décima menos que en diciembre. La de cobertura (peso de las provisiones sobre los activos morosos) se mantuvo en el 74%. El ratio de solvencia fully-loaded (que mide el capital como si la nueva normativa Basiela III estuviera toda en vigor) creció hasta alcanzar el 10,54%, 21 puntos básicos más. El crédito cayó el 1% respecto al cuarto trimestre del año pasado y los depósitos de clientes avanzaron un 1,5%.