El BBVA ganó 2.759 millones de euros en el primer semestre, lo que supone más que duplicar (107,7% de incremento) el de un año antes. El resultado ordinario (sin la venta de un 0,8% de su participación en un banco chino y la aportación de Catalunya Banc) mejoró el 52,9%, hasta los 2.013 millones, gracias sobre todo a la mejora de los ingresos (6,9%), ya que las provisiones para afrontar pérdidas permanecieron estables (2.381 millones, un 2,9% más). El banco cayó un 0,56% en bolsa en una sesión en que el Ibex 35 subió el 0,11%.

En España, el banco ganó 809 millones por su actividad bancaria, el 33,1% más, y perdió 300 millones por la inmobiliaria, el 35% menos. El país, por tanto, le aportó 509 millones de beneficio, el 255% más, gracias a la mejora de los ingresos (6,1%) y a las menores provisiones y números rojos del ladrillo. El banco espera que el saldo de crédito "empiece a crecer" en breve.

En su estreno ante la prensa, su consejero delegado, Carlos Torres Vila, rechazó que la toma de control del turco Garanti sea "en absoluto" un fracaso, pese a obligar al grupo a apuntarse pérdidas de 1.800 millones en el tercer trimestre: "Es una apuesta a largo plazo". También negó que vayan a hacer una venta extraordinaria de algún activo para compensar esos números rojos, que probablemente lleve al banco a pérdidas entre julio y septiembre.

El ejecutivo admitió que la situación geopolítica de Turquía es "ciertamente complicada" y supone un riesgo para el BBVA, pero se mostró confiado en que su experiencia de "siglos" en tratar con los problemas de sus países vecinos le permita seguir "gestionándolo bien".

Por áreas de negocio, además de los 809 millones de euros ganados por el BBVA en España, México siguió siendo el principal motor del grupo, con 1.041 millones, un 15,7% más; en América del Sur ganó 474 millones de euros, un 1,3% menos. Dentro de esta región, Colombia aportó 159 millones, un 21,4% más; Argentina, 124 millones, un 32,4% más; Y Perú, 92 millones, un 19,2 % más.