El consejo del Banco Central Europeo (BCE) ha dado luz verde a la desconsolidación de CaixaBank en CriteriaCaixa, de manera que ésta ya no ejerce el control sobre el banco y, en consecuencia, ya no es su empresa matriz. El BCE impuso un conjunto de condiciones a CaixaBank para poder abandonar la órbita de Criteria y considerarse un banco independiente cuya supervisión está en manos del BCE.

Entre estas condiciones figuraba que los derechos políticos y económicos de Criteria en CaixaBank no debían sobrepasar el 40%. Criteria vendió el 5,32% de CaixaBank por 1.068 millones de euros el pasado febrero reduciendo ya entonces su participación en CaixaBank en el 40%. Anteriormente, Criteria ya se había desprendido en diciembre del 2016 del 1,7% de CaixaBank por 315 millones mediante una operación similar efectuada a 3,15 euros por título.

La desconsolidación supone que el hólding presidido por Isidre Fainé dejará de estar supervisado por el BCE, que centrará su atención directamente en CaixaBank. La desconsolidación de CaixaBank tiene otro efecto: la Fundación Bancaria La Caixa ya no deberá constituir un fondo de reserva para poder acudir al rescate del banco si fuera necesario, una condición que exige la nueva Ley de Cajas de Ahorros y Fundaciones Bancarias.

Bajar al 40% la participación en el banco cotizado no es la única condición que impuso el BCE a CriteriaCaixa. El hólding (accionista de referencia también de Gas Natural y Abertis) deberá dejar de financiarse a través de CaixaBank y sus consejeros dominicales en el banco no podrán superar el 40% del consejo de administración.