El Gobierno asegura que el conflicto entre el Estado y las instituciones catalanas no está pasando factura a la economía, pero donde sí se deja sentir es en el mercado. Los inversores llevan semanas actuado con cautela (que no con miedo) respecto a España porque no saben qué sucederá a partir del domingo. En consecuencia, la bolsa española viene comportándose peor que el resto de grandes mercados de valores europeos, como ha vuelto a suceder este viernes. El Ibex 35 ha subido un 0,51%, a los 10.381,5 puntos, menos que los índices británico, alemán y francés. En el mes se ha apuntado un alza del 0,79%, también por debajo de sus homólogos, que se han beneficiado de la relativa disminución de la tensión entre Estados Unidos y Corea del Norte, que penalizó las cotizaciones en agosto. En lo que va de año, el selectivo español ha subido un 11%, pero frente al segundo trimestre ha bajado un 0,6%.