CaixaBank ha sido este miércoles el primer emisor español del año de deuda, con un doble tramo de cédulas hipotecarias a largo plazo. La nueva emisión a 10 años, por importe de 1.000 millones de euros, se ha colocado a un nivel de 22 puntos básicos sobre el 'midswap', claramente por debajo del nivel de 60 puntos básicos al que emitió su última cédula a 10 años en enero del pasado año. El cupón ha quedado establecido en el 1%.

Paralelamente, CaixaBank también ha reabierto la emisión de cédulas a 15 años que realizó en julio del 2017 para ampliarla en 375 millones de euros, fijando el nuevo importe de esta referencia en 750 millones de euros. En este caso, el precio se ha establecido en 32 puntos básicos sobre el 'midswap', un punto menos que el precio ofrecido entonces.

El éxito de la emisión se refleja en la demanda conjunta para las dos emisiones que ha superado los 1.750 millones de euros. Esta nueva emisión refuerza los activos líquidos de alta calidad de CaixaBank que, a 30 de septiembre, alcanzaban los 71.581 millones de euros, más de 2,5 veces por encima del mínimo requerido del 80%.

Demanda internacional

CaixaBank, entidad presidida por Jordi Gual, ha aprovechado las buenas condiciones del mercado para realizar esta emisión y demuestra la confianza y la puesta en valor de las fortalezas de la entidad por parte de los inversores. Esta emisión ha obtenido una buena respuesta por parte de los inversores institucionales, con más de 90 órdenes de inversores institucionales. Además, destaca la demanda recibida por parte de inversores internacionales. El 97% de la demanda procede de Europa.