El consejo de administración de Cajasur decidió ayer acogerse a la ley financiera para pasar a depender del Ministerio de Economía en lugar de la Junta de Andalucía, tal como permite la citada ley, que entró en vigor el pasado domingo, a las cajas vinculadas a la Iglesia. A pesar de ello, garantizó que la sede social permanecerá en Córdoba, que mantendrá sin recortes la obra social, que se desarrollará en Córdoba y Andalucía.

Manuel Chaves, presidente de la Junta, aseguró ayer que cuando gobierne el PSOE, cambiará la ley financiera. La Diputación de Córdoba, por su parte, impugnará el acuerdo del consejo de Cajasur. El director general de la caja cordobesa, Francisco Jurado, dijo que "la decisión ha sido tomada desde la libertad empresarial y responde al carácter fundacional histórico de la entidad". El director general adjunto de presidencia de Cajasur, Diego Jordano, manifestó que lo único que se produce con la ley financiera es "una reforma competencial entre lo que antes eran materias de la Junta de Andalucía y el Ministerio de Economía".