La ministra de Economía, Nadia Calviño, defendió ayer la necesidad de subir impuestos en España para poder hacer compatible un mayor gasto social y el respeto a la estabilidad presupuestaria, y advirtió de que el incremento de la fiscalidad será mayor si la oposición de PP y Ciudadanos impide que el Parlamento apruebe los nuevos objetivos de déficit más holgados del Gobierno. Calviño explicó que la ejecución de las cuentas heredadas del anterior Gobierno que presidía Mariano Rajoy dará como resultado un déficit del 2,7% del PIB en el 2018 (en lugar del 2,2% previsto).

La nueva senda de déficit negociada con Bruselas prevé un objetivo del 1,8% para el 2019, pero si la mayoría absoluta del PP en el Senado impide su aprobación por el Parlamento el Gobierno tendrá que ceñirse al objetivo más exigente del 1,3% para el conjunto de las administraciones (una diferencia de 6.000 millones) y para cumplirlo -según el razonamiento de Calviño- sería necesario una subida de impuestos mayor de la que pretende el Ejecutivo de Sánchez.

LEY HIPOTECARIA

La Ley Hipotecaria forma parte de la advertencia que lanzó Calviño durante un desayuno informativo organizado por Fórum Europa donde también reprochó a la Mesa del Congreso de los Diputados haber evitado la tramitación urgente de la reforma de la norma (heredada del Gobierno de Mariano Rajoy) con el consiguiente riesgo de la imposición de una multa millonaria en octubre por parte de las instituciones europeas. «En julio pedimos la tramitación urgente de esta ley y lamentablemente esta semana nos llega la noticia de que la Mesa del Congreso lo ha retrasado», dijo.

En efecto, los votos de PP, Ciudadanos y Podemos en la Mesa del Congreso evitaron el impulso urgente del proyecto que ya se tramita en la Comisión de Economía de la cámara baja. Fuentes de la Comisión, sin embargo, reprochan al Gobierno no haber remitido al Congreso de los Diputados el informe que los propios parlamentarios requirieron al nuevo Ejecutivo tras producirse la moción de censura que dio la presidencia a Pedro Sánchez, informa Pilar Santos. Además, el ponente de Ciudadanos, Francisco de la Torre, replicó a la ministra de Economía que a estas alturas no tiene sentido reclamar el trámite de urgencia para un texto que ya está en la Comisión de Economía. «Las palabras de la ministra son desafortunadas y no ayudan», dijo De la Torre, que atribuyó el retraso en la trasposición de la directiva europea al anterior Gobierno del PP.

La posible multa podría alcanzar los 100.000 euros por cada día de retraso desde marzo del 2016, fecha tope para haber traspuesto la directiva al ordenamiento español. «Cuando llegué al Ministerio nos encontramos con 14 directivas pendientes de trasposición», heredadas de su antecesor Luis de Guindos, se quejó Calviño.

La ministra confirmó ayer, además, que el Gobierno trabaja en el diseño de una tasa sobre las transacciones financieras similar a la implantada en Francia. Calviño explicó que su colega francés, Bruno Le Maire, le trasladó la semana pasada una valoración «muy positiva» de la implantación de la tasa en el país vecino «desde el punto de vista de la recaudación y también en el sentido de que no ha provocado deslocalizaciones» del ahorro.

«MENSAJES ALARMISTAS»

Durante su intervención, la ministra rechazó también los «mensajes alarmistas» sobre un cambio brusco de ciclo en la economía española alentados, sobre todo, por dirigentes del PP. «España se encuentra en una fase positiva. Nuestro crecimiento se fundamenta en bases sólidas», dijo.

Según el análisis del Ministerio, la sucesión de indicadores económicos confirman la «tendencia a la moderación» prevista para la economía española, pero descartó hablar de «frenazo» en la recuperación. El Gobierno -dijo Calviño- mantiene la previsión del Ejecutivo anterior de una tasa de crecimiento del 2,7% para este año. «De momento los indicadores lo confirman. Pero si al final hay que revisarlo, tampoco será un drama», remató.