La Denominación de Origen Protegida Cariñena recogerá los sarmientos y residuos de las viñas para producir biomasa que se transformará en el Centro Energético Innovador Sostenible (CEIS) situado en esta localidad.

Los responsables del Consejo Regulador firmaron ayer el acuerdo con las empresas del Clúster Empresarial Biomasa & Energía (CEB&E) promotoras de la iniciativa. El presidente de esta agrupación empresarial, Francisco Javier de Miguel, destacó que esta tecnología tiene como uno de sus objetivos finales permitir a los 1.600 viticultores de la zona un ahorro global de entre 300.000 y 700.000 euros al año ya que, hasta ahora, tenían que asumir un gasto de 45 euros por hectárea.

El CEIS Campo de Cariñena recogerá estos residuos de las viñas y producirá una "energía limpia y menos costosa de la que se beneficiarán los habitantes de la zona", lo que generará "un sistema de economía circular", según explicó la compañía en una nota de prensa.

El presidente del clúster estimó que se podrá alcanzar un ahorro del 50% en el coste de la calefacción de los edificios que cuenten con caldera de biomasa. El proyecto supondrá una inversión de más de cinco millones de euros y la creación de medio centenar de puestos de trabajo.