La crisis está pasando una factura demasiado elevada. Sobre todo a los aragoneses que se han quedado sin trabajo, pero también a aquellos que lo mantienen. Según volvió a alertar ayer CCOO, ni siquiera tener un empleo garantiza ya alejarse del riesgo de exclusión social. De hecho, el informe que presentó ayer en Zaragoza el sindicato asegura que más de un cuarto de los asalariados de la comunidad --un total de 119.700, el 28% del total-- vive por debajo del umbral de la pobreza. "El sueldo medio que reciben estas personas no supera los 900 euros netos al mes, una cifra que según la Organización de las Naciones Unidas (ONU) no garantiza un nivel de vida digno", denunció el secretario de Acción Sindical, Manuel Pina.

La situación aún es más asfixiante para 84.500 aragoneses que, de media, ganan menos de 700 euros brutos al mes repartidos en 14 pagas, lo que afecta a casi un quinto de la población que trabaja por cuenta ajena. "Esto supone que más del 20% de los empleados cobra el salario mínimo interprofesional (645 euros) o menos", lamentó ayer Pina.

El estudio de CCOO destaca que el incremento de los contratos a jornada parcial --se han duplicado desde el inicio de la crisis-- está detrás de esta devaluación salarial y subraya que el número de horas trabajadas por cada empleado sigue en mínimos históricos. En este sentido, Pina insistió en que esta parcialidad no es deseada "en la inmensa mayoría" de los casos y añadió que afecta sobre todo a trabajadoras del sector del comercio, la hostelería o el hogar.

MÁS DESIGUALDAD

El informe indica asimismo que la reducción del poder adquisitivo se ha cebado más con los empleados que menos ganan. Así, y entre el 2010 y el 2013, la caída entre el grupo de aragoneses que cobra de media 436 euros brutos al mes fue del 18%, mientras que el descenso entre los que reciben un sueldo medio de 4.500 euros solo fue del 8%.

Todo ello ha provocado que la brecha salarial haya crecido a marchas forzadas durante la crisis. "En apenas seis años hemos pasado de una ratio de 7 a 1 entre el colectivo de empleados que menos y más cobra a otra de 10 a 1, lo que evidencia un incremento enorme de la desigualdad", señaló Pina, que recordó que en otros países como EEUU o Reino Unido no se ha logrado reconducir esa brecha salarial.

A este respecto, el secretario de Acción Sindical de CCOO aseguró que la negociación colectiva es "la mejor herramienta que hay en el país" para frenar la caída de los salarios más bajos. "Por eso es muy importante que los convenios no se pierdan, porque es ahí donde podemos dar la batalla", comentó.

Además, insistió en elevar la cuantía del salario mínimo interprofesional (SMI) para "espolear" los sectores más afectados por la devaluación de sueldos, una demanda que los sindicatos llevan años reclamando. "De esta forma lograríamos tirar hacia arriba sus retribuciones", indicó. "Evidentemente con subidas del 0,5% como la de este año no se conseguirá nada, por eso hay que incidir", añadió.

En este sentido, Pina criticó que diferentes instituciones europeas o nacionales (como por ejemplo el Banco de España) sigan insistiendo en la vía de los recortes, en lugar de un aumento de rentas "que permitiría elevar el consumo interno". "Antes de la crisis solo el 0,7% de los trabajadores cobraba el SMI, ahora ese porcentaje se ha triplicado hasta llegar al 2,1%; está claro que no podemos seguir por este camino", concluyó.