CCOO ve «elementos positivos» en la compra de Opel por parte del grupo PSA, pero se mantendrá «vigilante» para que se cumplan todos los compromisos. Así lo transmitió ayer el sindicato a los trabajadores y afiliados de la planta de Figueruelas y de las empresas auxiliares que participaron en la asamblea informativa celebrada en Zaragoza.

El responsable de CCOO en Opel España, Chema Fernando, insistió en que la operación tiene elementos positivos para el mantenimiento el empleo o el lanzamiento de nuevos modelos, pero el sindicato no quiere caer en «un exceso de confianza». La operación es, apuntó, «más ortodoxa» que la planteada hace unos años por Magna, ya que PSA es un fabricante que «quiere hacer coches» y eso transmite cierta «tranquilidad» a los trabajadores.