La planta de Opel España tendrá que "lidiar con el toro de la recesión". El director general de Opel España, Antonio Cobo, no pudo ser más explícito al definitir la actual situación de la factoría de Figuerueleas. No obstante, para empezar se mostró confiado en que se pueda alcanzar un acuerdo con el comité para ampliar el expediente de regulación de empleo (ERE) actual, que afecta durante 62 días a toda la plantilla. En concreto, la propuesta de la dirección es darle continuidad durante cien días más a lo largo de este año y del 2013, como consecuencia del descenso de las ventas de vehículos en Europa.
"Las ventas se están reduciendo drásticamente y en España nos quedan dudas de si este año podremos llegar a los 800.000 vehículos de ventas", declaró Cobo ayer, tras recibir el Premio Medio Ambiente de Aragón en el ámbito de Empresas, que la DGA entregó a General Motors por su gestión ambiental.
Para el director general de Opel España es preciso estudiar "la mejor manera de buscar una solución que sea factible para la planta y para la compañía en general que está pasando dificultades", así como aportar una solución "responsable con nuestros empleados".
En este sentido, ha remarcado que "la responsabilidad de nuestros representantes sindicales y el comportamiento que ha tenido la plantilla siempre nos hace pensar que podremos llegar a un acuerdo porque ambas partes entendemos las necesidades de la otra parte", aunque en estos momentos "seguimos en negociación", ha apuntado.
Así, ha rechazado que la situación sea similar a la vivida hace algunos años y que la factoría corra riesgos, porque Figueruelas "es una planta muy bien situada, muy competitiva en lo que es GM en Europa y en el mundo" y ahora la situación es distinta, porque antes "la empresa como tal tenía problemas serios", pero ahora "es rentable y está funcionando bien a nivel mundial". LIDIAR CON DOS TOROS
REESTRUCTURACIÓN Por otro lado, Cobo incidió en la reestructuración que está preparando GM en Europa. Por tanto, al ERE se suman los ajustes en las plantas del viejo continente. "Ahora tenemos que lidiar con esos dos toros, con la recesión que estamos viviendo en Europa y con el problema que tenemos nosotros", remarcó Cobo.
A propósito de su contenido, consideró que "será un plan muy discutido y, en la medida de lo posible, acordado con los representantes sindicales y que se buscará lo mejor para las dos partes, para la empresa y los trabajadores" En este contexto, descartó que existan cierres previstos de otras plantas europeas.
