El pleno del comité de Android ha decidido convocar paros en protesta por la decisión de la compañía de inaplicar el convenio colectivo, lo que afectaría a las condiciones laborales de sus más de 400 trabajadores. La compañía, dedicada al montaje de puertas, salpicaderos y suspensiones en la planta de Opel en Figueruelas, quiere reducir los salarios alrededor del 7,5% para poder optar a nuevos contratos del fabricante alemán, adquirido ahora por el grupo PSA.

Sin embargo, los sindicatos ya advirtieron que se negarían a tal rebaja de las nóminas, motivo por el cual han decidido convocar paros los días 27 y 30 de abril, además del 2 y 4 de mayo, según informaron fuentes sindicales. Los paros serán de cuatro horas en cada turno y podrían prolongarse más días mientras Android no retire el procedimiento de inaplicación del convenio. Además, el comité exige que se readmita a los compañeros despedidos en la negociación.

Los paros anunciados por los empleados de Android en Figueruelas podrían poner en jaque a la factoría aragonesa, ya que tendría que paralizar la producción. Está previsto que antes del primer paro se celebre un encuentro entre las partes en el SAMA.