La compañía americana Cooper Standard inauguró ayer de forma oficial su centro productivo de Tarazona, aunque la actividad en la planta comenzó el pasado mes de enero. La fábrica, que actualmente emplea a 80 personas, prevé alcanzar los 400 trabajadores en el 2019. Así lo puso de manifiesto el director de Cooper Standard Tarazona, Ángel Sanz, quien explicó que los planes de crecimiento de la planta, que ya tiene asignados varios proyectos para Opel, el grupo PSA y Ford, aumentarán la facturación hasta los 60 millones de euros en un horizonte de tres años.

La empresa comenzó su actividad con una inversión inicial de 3,5 millones de euros y da trabajo a 80 personas, si bien prevé seguir aumentando su plantilla hasta los 90 trabajadores este año, los 200 a finales del 2017 y los 400 en el 2019.

El alcalde de Tarazona, Luis María Beamonte, que participó en la inauguración, se mostró satisfecho con la implantación de esta empresa que «supone generar oportunidades para nuestros vecinos».

El presidente de Cooper Standard para Europa, Fernando de Miguel, dijo que quieren que la fábrica sea la planta «corazón» en España para PSA. El centro produce juntas de estanqueidad para Citroën y Peugeot que suministran a la fábrica de Citroën en Vigo y a otras factorías del grupo PSA en Francia. Este año prevé facturar 8 millones.