Las Cortes de Aragón aprobaron ayer una iniciativa en la que instan a garantizar la sostenibilidad del sistema público de pensiones y que se vuelva a adoptar un tope en el gasto anual de la hucha, así como a introducir su financiación por vía impositiva.

La iniciativa, presentada por Podemos y apoyada por PSOE, CHA e IU y con el voto en contra de PP, PAR y Ciudadanos, pide que se modifique la estructura productiva de España y que se avance en una legislación laboral que elimine la precariedad y disminuya el paro para incrementar las cotizaciones sociales que permitan la viabilidad del sistema de pensiones.

En otro punto, se solicita que se estudie, en el seno del Pacto de Toledo, la posibilidad de fijar de nuevo la edad de jubilación ordinaria a 65 años y permitirla a los 61 años cuando se hayan cotizado 35 años. Además, el Parlamento autonómico pide que se suprima el índice de revalorización de las pensiones y que se indexe su evolución al IPC para garantizar el poder adquisitivo de los pensionistas. La portavoz de Podemos, Maru Díaz, reclamó un «pacto generacional» en defensa de las pensiones.