-DKV ha presentado esta misma semana los resutados del 2017. ¿Qué balance hace del año?

-Seguimos en la senda de crecimiento rentable en la que llevamos 15 años. Además, estamos profundizando en el objetivo de la transformación tecnológica que nos marcamos hace dos años dentro del nuevo plan estratégico. A la vez, queremos mantener resultados y seguir aumentando los clientes.

-¿Qué papel desempeña Aragón en el desarrollo futuro de la compañía?

-Lo más relevante es que somos la compañía de seguros aragonesa, ya que tenemos la sede fiscal y operativa -la torre DKV- en Zaragoza. Desde aquí estamos dando servicio al resto de España y eso representa un hecho relevante. Además, somos una de las primeras empresas de Aragón en facturación y empleo. Quizá, en la comunidad, la gente no es consciente de esto. Hemos desarrollado los nuevos servicios desde Aragón, principalmente todo lo relacionado con inversión tecnológica y digitalización. Por tanto, el core tecnológico de la compañía está en Zaragoza. También tenemos aquí el departamento de sistemas, los procesos de integración de e-health... Todo esto supone dar trabajo de alta cualificación a personas de Aragón y generar una red de proveedores también de alta cualificación

. -¿Seguirá la sede central de la compañía en Zaragoza?

-Desde que iniciamos el proyecto hemos defendido que es importante mantener la sede en Zaragoza. Todas las compañías tenemos una cierta presión para trasladar las sedes a ciudades como Madrid o Barcelona. En nuestro caso, la presión nos llevaba a ubicar la sede en Barcelona, porque era donde más clientes teníamos. Pero siempre hemos dicho que es una bendición para la compañía tener una sede y un equipo en una ciudad como Zaragoza. Es muy sano que las centrales de las grandes compañías estén localizadas en varios puntos de un país, algo que ocurre, por ejemplo, en Alemania o EEUU. Es una barbaridad que se concentren en solo una o dos ciudades

. -¿Cómo se ha vivido en DKV el conflicto político en Cataluña?

-Nunca hemos dudado de mantener la sede en Zaragoza. El conflicto catalán ni nos ha inmutado. Además en esta ciudad tene mos un colectivo de profesionales magnífico, gente bien preparada y acceso a talento sin problema, incluso con más ventajas respecto a otras ciudades. La lealtad de los empleados es superior y la rotación es menor, el coste de la localización del edificio también es menor. Sabemos que para el equipo directivo tener un modelo distribuido supone un pelín más de esfuerzo, pero con las nuevas tecnologías y con el AVE esto es una anécdota

. -Hablaba del personal. DKV vuelve a estar entre las mejores compañías de España para trabajar. ¿Cómo se consigue esto?

-Más allá de los resultados y del beneficio económico, una compañía tiene que velar por su relación con el cliente, con los empleados y los proveedores. Nos importa el retorno al accionista en términos de beneficio, pero nos importa tanto o más estos otros factores. Un resultado sostenible a medio y largo plazo únicamente es posible si el equipo humano está motivado y comprometido. Creo que seremos la compañía que más años lleva apareciendo en la lista de Best Place to Work. El compromiso y la motivación de los trabajadores es una garantía de futuro porque la gente se siente parte del proyecto. Si las personas estuvieran desmotivadas y cabreadas supondría tener problemas sí o sí.

-¿Cómo se imagina a la compañía en el medio plazo con la implantación de las nuevas tecnologías?

-Sin duda, va a cambiar nuestro rol. Hemos sido un facilitador de accesibilidad al médico privado a partir de un coste mensual asumible. A partir de ahora, vamos a estar mucho más cerca del cliente y le vamos a dar recomendaciones y consejos. De hecho, acabamos de lanzar una aplicación que da apoyo a las personas para que puedan cuidar su salud. También contamos con una app que sirve para chequear síntomas, con acceso directo (vía chat o videoconferencia) a un médico. Ahora vamos mucho más allá y es posible porque la tecnología lo va a permitir

. -¿El factor tecnológico va a contribuir a mejorar los márgenes de la compañía durante los próximos años?

-Para lo que ofrecemos, el precio de la prima es muy ajustado. En España, el coste de un seguro de salud es muy ajustado comparado con cualquier país de nuestro entorno. Por suerte, con la tecnología podremos dar servicio con un menor coste.

-En Aragón hay un debate abierto en relación a la aplicación de determinados impuestos. ¿Penaliza a DKV la estructura fiscal de la comunidad?

-No. Por el hecho de estar en Aragón, la compañía no paga más ni menos. Otra cosa son los individuos. Cuando se habla de diferencia de trato fiscal entre las autonomías, eso no afecta a las empresas, pero sí a las personas. Hay comunidades donde cualquier empleado en función de su renta pagará más o menos en una u otra región. Madrid nos genera conflictos a los que tenemos empleados fuera de la esta ciudad si lo comparamos con tenerlos en la capital. Pero esto no afecta a la empresa, solo a los empleados y proveedores.

-¿Cuáles van a ser los signos diferenciales de DKV en los próximos años respecto a la competencia?

-No somos una compañía de precio. Nuestra apuesta es de calidad de servicio y de oferta de servicio médico y cobertura. Además, queremos ser referentes en temas de salud a través de recomendaciones, la opinión de los expertos y apoyos con aplicaciones, entre otros.