El motor del vehículo eléctrico no termina de arrancar. Aunque la tecnología está disponible, comercialmente no despunta por diferentes razones, lo que ha echado por tierra las grandes expectativas de hace unos años. Con todo, su despegue es "irreversible", según aseguraron ayer los expertos del automóvil que participaron en la II Convención ADEA organizada por la Asociación de Directivos y Ejecutivos de Aragón, que reunió a un millar de directivos en el Auditorio de Zaragoza con la energía como eje de las conferencias.

Las cifras hablan por sí solas. El Gobierno auguró en abril del 2010, con motivo del lanzamiento de un ambicioso plan para impulsar el coche eléctrico, que en el 2011 se matricularían en España 20.000 eléctricos puros e híbridos enchufables. La realidad es bien distinta. En los nueve primeros meses del año se vendieron 249 eléctricos puros y 7.849 híbridos, marcas que en el desagregado de Aragón bajan a tres y 106, respectivamente, según los datos facilitados a este diario por la asociación de fabricantes de automóviles Anfac.

A pesar de este testimonial impulso, el director de e-movilidad de Opel España, Marcelino Iglesia, aseguró que "la electrificación del automóvil es una realidad a medio plazo", pero no quiso dar fechas, porque la situación actual del sector es "muy incierta". "Pero es irreversible porque económicamente al final va a compensar", agregó.

También consideró "indudable" que el siguiente paso en la consolidación de la movilidad sostenible será el coche de hidrógeno. Sobre el potencial de esta tecnología abundó el director de la Fundación del Hidrógeno en Aragón, Luis Correas. Ambos coincidieron que el impulso de este nuevo modelo se retrasará más de lo previsto.

Según las previsiones de las consultoras y los organismos oficiales citadas por el directivo de Opel, el vehículo eléctrico puro supondrá en el 2020 entre el 3% y el 7% del parque automovilístico europeo y los híbridos entre el 7% y el 17%. La mayor o menor proporción dependerá de la evolución del precio del petróleo.

RENOVABLES Como principales obstáculo para la eclosión de la movilidad eléctrica, Iglesia señaló el elevado coste y la durabilidad de las baterías y las infraestructuras de carga. En este contexto, destacó la apuesta de su compañía por el vehículo eléctrico de autonomía extensible, tecnología que posee el Opel Ampera.

La ponencia de apertura de la Convención ADEA corrió a cargo del vicepresidente de CEDE (Confederación Española de Directivos y Ejecutivos), Ramón Adell. Otro de los ponentes destacados de la jornada fue el director de Endesa Aragón, Jaime Gros Bañeres, aseguró que España ha cumplido ya con el objetivo europeo del 20% de energías renovables, "así que es el momento de parar", apuntó. "No se trata de ser el país europeo más energéticamente renovable si luego no podemos pagar la inversión hecha".

El foro de ADEA fue clausurado por el consejero de Economía, Francisco Bono, quien recalcó que la energía es un sector "ultraestratégico" para la región.