Los sindicatos de estibadores presentaron ayer un nuevo preaviso de huelga para nueve jornadas alternas a partir del próximo 6 de marzo que se hará efectivo si el Consejo de Ministros del próximo viernes aprueba sin cambios el real decreto-ley de reforma del sector de la estiba. Si se llevan a cabo, los paros se desarrollarán durante tres semanas a razón de tres días alternos por semana y, al igual que los anteriores, en horas alternas.

Este nuevo aviso de huelga no supone una ruptura de las negociaciones sino una advertencia ante lo que pueda decidir el Consejo de Ministros. Para hoy hay previstos nuevos encuentros entre los representantes de los trabajadores y de las empresas, juntos y por separado, con el mediador designado por el Gobierno para acercar posiciones, el presidente del Consejo Económico y Social, Marcos Peña.

El Ejecutivo parece decidido a sacar adelante el decreto, que en el plazo de un mes debe ser convalidado por el pleno del Congreso. Íñigo de la Serna, ministro de Fomento, dijo ayer que «urge» cumplir con los requerimientos de la Comisión Europea que impone a España una multa de 134.000 euros por cada día que no entre en vigor la nueva regulación de la estiba.