La prioridad de Alibérico cuando compró la fábrica de Sabiñánigo era recuperar clientes después de que la planta --en liquidación desde febrero del 2013-- estuviera parada más de dos meses. Según indicó ayer a este diario el presidente del grupo, Clemente González Soler, Iberfoil cuenta actualmente con 40 clientes, de los que 28 son extranjeros. "El 60% de nuestras ventas ya se cierran en el exterior, sobre todo en Alemania e Italia, aunque también operamos en Suiza o Austria", explicó.

Alibérico es el primer grupo español del sector del aluminio con 1.200 empleados directos, una facturación de 200 millones y fábricas en cuatro continentes.