Piezas para maquetas, pulseras, juguetes, prototipos para trabajos escolares o hasta el avatar de una persona. Son algunas de las múltiples aplicaciones domésticas y recreativas que ofrece la tecnología de tres dimensiones, cuyas posibilidades de impresión y escaneado están ahora más que nunca al alcance de los zaragozanos con la reciente apertura de la tienda Tr3sDland. Este singular comercio, franquicia de una cadena de origen andaluz, quiere acercar este sector en auge al público general.

El establecimiento, que abrió sus puertas hace solo un mes, en el número 5 del paseo Fernando el Católico, ha sido puesto en marcha por José Escribano. El local, de 70 metros cuadrados, ofrece servicios de impresión, diseño y escaneado en 3D. Una copistería muy particular donde pueden adquirirse estas revolucionarios impresoras a precios que van desde los 500 euros --la más básica-- a una de 1.690 euros, más técnica e ideal para una pyme.

Los consumibles de estos aparatos (material plástico) son otra parte importante de la oferta de Tr3sDland, que ofrece además originales productos y servicios. Uno de los más destacados es el mini selfie 3D, una representación gráfica tridimensional de una persona a pequeña escala (de 10 a 20 centímetros) que puede conseguir desde 29 euros.

"Vengo del mundo del diseño industrial y, después de informarme, ví que en el mundo 3D podía encontrar una salida laboral", explica este emprendedor de 51 años, que ha contratado a un trabajador y cuenta además con la ayuda de su hijo David para llevar a buen puerto el negocio.

Tr3sDland cuenta en estos momentos con media docena de tiendas en España y en breve abrirá un segundo establecimiento en Zaragoza, en el Coso. El furor por el mundo 3D, dicen, no ha hecho más que empezar en España.