El Estado solo ha recuperado una cantidad «exigua» de las ayudas a la banca: 4.831 millones de euros de los 58.996 millones inyectados, el 8,18%. Sus cifras no coinciden con las del Banco de España de septiembre (2.886 millones recuperados, el 5,6% de los 51.303 millones aportados), pero confirman que con toda probabilidad no se conseguirá recuperar todo, como se cansó de asegurar el Gobierno.
El presidente del FROB, Jaime Ponce, argumentó ayer en el Congreso de los Diputados que también espera recuperar de Unicaja-Ceiss y de Ibercaja-Caja 3 los 604 y 387 millones, respectivamente, que les prestó en bonos convertibles, más 140 millones en intereses, así como los 2.192 millones inyectados como capital en el banco malo Sareb, con lo que se alcanzaría el 13,8% del total de ayudas. Con todo, admitió que «es muy difícil estimar, máxime teniendo en cuenta la actual volatilidad de los mercados», cuántos recursos se recuperarán con la venta de BFA-Bankia (22.424 inyectados) y BMN (1.645 millones).
En esta línea, aseguró que la negativa evolución bancos europeos en bolsa «ha dificultado» la venta de Bankia y BMN. Por ello, Ponce explicó que el FROB anunció hace un mes que está analizando su fusión, si bien advirtió de que la venta individual de los bancos se estudiará «con idéntica profundidad y propósito». La decisión se tomará «a finales de este año o principios del próximo», para negociarla después con Bruselas y ver si es necesario cambiar la ley que obliga a vender las entidades a cierre del ejercicio 2017 (Bankia) y marzo del 2018 (BMN).
El presidente del FROB también reconoció que a la cifra total de ayudas se podrían sumar los 1.638 millones en gastos que ha soportado el organismo en el proceso, con lo que el coste final ascendería a 60.634 millones. Y que la factura podría ser aún mayor si las pérdidas que sufre el Estado por las garantías que dio a los compradores de las entidades nacionalizadas son mayores de los 2.451 millones previstos. «No es prudente decir hoy cuál es la cuenta final del rescate financiero», remachó.
INDEMNIZACIÓN A ABANCA
La cosa podría haber sido todavía peor: la Audiencia Nacional dictó ayer una segunda sentencia en el caso de las prejubilaciones millonarias de Novacaixagalicia (hoy, Abanca), como le ordenó el Tribunal Supremo, que obliga a los exdirectivos José Luis Pego y a Gregorio Gorriarán a indemnizar con 6,4 y 3,9 millones a la entidad sucesora del banco gallego, y no al FROB como dictaminó inicialmente.
Fuentes del FROB, con todo, precisaron que, en virtud del contrato de compraventa de la entidad alcanzado con el venezolano Banesco, Abanca le entregará finalmente las cantidades que recupere. Ese paso se producirá durante la fase de ejecución de la sentencia y, con el objetivo de que así sea, la Abogacía del Estado comenzó ayer los trámites para garantizarlo.
