El ministro de Fomento, Íñigo de la Serna, advirtió ayer de los riesgos que tendrían las huelgas previstas por los estibadores ante la aprobación del decreto que reforma este sector y que, en su opinión, garantiza el mantenimiento del empleo.

De la Serna se refirió al anuncio de huelga de los estibadores en declaraciones a los periodistas en Pekín, donde participó en las sesiones del foro económico y comercial sobre la Nueva Ruta de la Seda al que asistió también el presidente del Gobierno, Mariano Rajoy.

Los sindicatos de estibadores, tras conocer el sábado el decreto aprobado por el Gobierno, presentaron un preaviso para ocho jornadas de huelga, cuatro de ellas en mayo y otras tantas en junio.

Las movilizaciones se llevarán a cabo entre el 24 de mayo y el 9 de junio, concretamente todos los lunes, miércoles y viernes en horas impares.

Ante ello, el ministro alertó de que este tipo de movilizaciones generan un grave daño a la economía del país y a los propios puertos. En concreto, resaltó que provoca un riesgo evidente de que alguno de los tráficos marítimos que se desvían cuando se anuncia una huelga, no se recupere posteriormente y se dirija hacia puertos de otros países.

«Eso es lo que no desea nadie, ni las empresas, ni el Gobierno, ni seguramente los propios sindicatos», añadió antes de confiar en que, finalmente, no se lleven a cabo esas huelgas. En su opinión, no deberían convocarse porque el decreto incluye «medidas más que suficientes para garantizar el mantenimiento del empleo y mejorar la productividad de los puertos».

Por su parte, el portavoz de Ciudadanos en la Asamblea de Madrid, Ignacio Aguado, aseguró que el apoyo al nuevo decreto de la estiba aún no está asegurado. El Ejecutivo prevé convalidar el decreto el próximo jueves en el Congreso.