El presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, anunció ayer que aumentará la previsión de crecimiento del PIB para el 2018 del 2,3 al 2,5%, una decisión que avanzó tras los movimientos políticos en Cataluña en los últimos días. Rajoy aprovechó un acto en el aeropuerto de Elche-Alicante con motivo de la celebración del 50 aniversario de esta infraestructura para hacer ese anuncio de aumento de la previsión del crecimiento económico en el presente ejercicio.

No ligó en sus palabras el jefe de Ejecutivo este aumento a la situación en Cataluña, pero fuentes del Gobierno lo pusieron de ejemplo del optimismo que existe ante cómo se pueden desarrollar los acontecimientos políticos.

Así, recalcaron que hay que seguir manteniendo la prudencia y la precaución teniendo en cuenta los precedentes de cómo han actuado los independentistas, pero, a priori, ven alejarse la posibilidad de una repetición de las elecciones.

La decisión del Tribunal Constitucional de impedir la investidura de Carles Puigdemont y el hecho de que desde los soberanistas se plantee ya abiertamente la posibilidad de otro candidato cree el Gobierno que es muy positivo.

Si el Ejecutivo rebajó su previsión inicial de crecimiento económico de España para el 2018 precisamente por la situación en Cataluña, las fuentes explican que con la revisión al alza se traslada un mensaje de que se puede encauzar próximamente la situación en esta comunidad.

Rajoy no citó a Cataluña en su intervención en el acto en el aeropuerto de Alicante, pero sí lanzó un mensaje en favor del sentimiento como español. «España es un gran país y hay muchos motivos para sentirse orgullosos de ser españoles; entre ellos, que supone participar de un sentimiento que no va contra nada, porque es integrador, inclusivo, y nos ha dado el éxito como nación», subrayó. Rajoy estuvo acompañado del ministro de Fomento, Íñigo de la Serna, y del presidente de la Comunidad Valenciana, Ximo Puig, entre otros.