El ministro de Economía, Román Escolano, aseguró ayer que el Gobierno quiere presentar «cuanto antes» el impuesto a las grandes empresas digitales en España y empezar a recaudarlo en el 2019, después de que el titular de Hacienda, Cristóbal Montoro, anunciase el viernes que esta tasa ayudará a financiar las pensiones. «Nuestra idea es presentarlo cuanto antes y que tenga efectos también en el 2019 y sucesivamente», dijo Escolano en la rueda de prensa posterior al Consejo de Ministros de Economía y Finanzas de la Unión Europea (UE) celebrado en Sofía.

Los Veintiocho debatieron por primera vez a nivel ministerial sobre la propuesta, que plantea imponer un impuesto del 3% sobre la facturación por ciertos servicios digitales de las empresas que facturen más de 750 millones de euros en todo el mundo y más de 50 millones en la Unión Europea.

El Gobierno español desea introducir este tipo de tasa antes de que haya acuerdo a nivel europeo, en la línea de lo que ya han hecho otros países como el Reino Unido, Italia, Francia o Alemania, según explicó Escolano. La oposición de casi una decena de países de la UE bloquea por el momento las posibilidades de acuerdo. «Hay muchas opiniones diferentes en torno a la mesa. Mentiría si dijera lo contrario. Pero creo que hay una base amplia de apoyo para la propuesta de la Comisión Europea y, en general, la voluntad de discutir», dijo en la rueda de prensa tras la reunión el comisario de Asuntos Económicos, Pierre Moscovici, responsable de la propuesta.

El ministro de Hacienda español dijo el viernes que esta «nueva fiscalidad» -en referencia a la propuesta europea del impuesto digital- se llevará al Pacto de Toledo y ayudará a financiar la anunciada subida de las pensiones, que tendrá un coste de 1.500 millones de euros para el 2018 y 1.800 millones para el 2019. Sobre la subida de las pensiones, el ministro Cristóbal Montoro indicó que el incremento anunciado para ambos años «está unido a un incremento de ingresos» que se incluyó en el cuadro financiero.