El fondo de reserva de la Seguridad Social, conocido popularmente como hucha de las pensiones, cayó durante el año pasado más que ningún otro ejercicio desde que estalló la crisis hasta situarse en 41.634 millones de euros. La razón fundamental es que salió más dinero del que entró. El Gobierno dispuso en el 2014 de 15.300 millones de euros, la mayor suma desde que el PP llegó al poder, y no lo compensó con aportaciones públicas porque el sistema de las pensiones no está en superávit sino en déficit.

El aumento del número de pensionistas y el mantenimiento de altas tasas de paro también afectaron negativamente al sistema, pese a que creció algo la afiliación a la Seguridad Social. Sin embargo, los nuevos empleos, con sueldos más bajos, y las diversas bonificaciones en las cuotas empresariales tampoco ayudaron a un sistema que entró en déficit hace un lustro. Para este año el Gobierno prevé que los números rojos del sistema queden por debajo del 1% del producto interior bruto (PIB).

DÉFICIT

El déficit es una de las razones por las que desde el 2011 el fondo no recibe ni un céntimo de dinero público. Ese año alcanzó el récord de casi 66.000 millones. En todo caso para pagar las pensiones el Ejecutivo podría haber sacado el dinero de otra partida o haber inyectado dinero. Recién llegada la crisis, los últimos presupuestos del Estado elaborados por el Ejecutivo de José Luis Rodríguez Zapatero (2011) ya no incluyeron las aportaciones anuales que fueron habituales, excepto en el 2009. Al año siguiente el Estado transfirió 1.740 millones de euros.

PÉRDIDAS EN TRES AÑOS

La situación se ha agravado porque a esta reducción de ingresos se une la salida de dinero para abonar, entre otras, las dos pagas extraordinarias del año. La cantidad detraída el año pasado (15.300 millones de euros) fue la mayor de los últimos tres ejercicios, más del doble de lo que sacó en el 2012 y supuso el 22,53% del total. En los últimos tres años la hucha de las pensiones ha perdido casi 34.000 millones de euros, lo que representa el 38% del total.

El fondo de reserva seguirá disminuyendo este año pero a un ritmo menos intenso, según dijo el secretario de Estado de la Seguridad Social, Tomás Burgos, después de asistir a la entrega por parte de la ministra Fátima Báñez, del informe anual en el Congreso de los Diputados. Una de las causas es que se ha frenado el ritmo de crecimiento del número de trabajadores que pasan a la situación de pensionistas. Entre enero y febrero pasados hubo algo más de 13.000 nuevos perceptores menos y casi 15.500 retribuciones menos.

MEJORA LA RENTABILIDAD

La disminución del fondo de reserva y la moderación de tipos en el pasado ejercicio ha hecho bajar la rentabilidad desde el ejercicio 2011, aunque el año pasado mejoró el 30%, hasta obtener 2.911 millones de euros en rendimientos.

Desde el 2000, el fondo ha ganado más de 22.000 millones. La comisión que gestiona el fondo, en la que están los sindicatos, decidió el año pasado vender los activos invertidos en deuda extranjera --francesa, alemana y holandesa, sobretodo-- y comprar deuda española. De lo contrario, la rentabilidad hubiera sido negativa. El valor de mercado del fondo es mayor y llega a los 47.721 millones de euros.