La jamonera Aire Sano, ubicada en La Puebla de Valverde (Teruel), cesará la actividad de su planta de deshuesado y loncheado el próximo 30 de abril. La dirección y el comité firmaron ayer el ERE de extinción para 21 de sus 31 trabajadores. Los diez empleados restantes se quedarán "entre cuatro y cinco meses" en la fábrica para manipular y dar salida al estoc de perniles que aún tiene la empresa, pero pasado este tiempo también pasarán a engrosar las listas del paro.

En un principio, Aire Sano --que está participada por el grupo Térvalis (35%), Cereales Teruel (35%), Caja Rural (15%) y Caja3 (15%)-- trasladó a los representantes sindicales su intención de ofrecer un plan de recolocaciones para "una parte" de la plantilla, ya que Térvalis está presente en varias firmas agroalimentarias de la provincia. Sin embargo, la compañía solo ha ofrecido tres recolocaciones directas en Cartesa, ubicada en Teruel y del grupo Térvalis. Las otras siete posibles recolocaciones son en compañías externas.

Seis de ellas podrían producirse en Jamones Hermanos Vivas, ubicada en Mora de Rubielos, a más de 40 kilómetros de La Puebla. "Habrá que ver quién quiere ir tan lejos y, además, dependerá de las condiciones que ofrezcan", explicaron desde el comité. El otro puesto lo podría crear la firma de lomo embuchado Comamala, situada en Teruel.

Lamentaron, por otra parte, que Aire Sano no ha igualado la indemnización que ofreció a los 14 despedidos en mayo del 2013, cuando cerró el secadero. "Ellos recibieron 23 días y ahora no ha pasado del mínimo legal", criticaron.

Según el comité, la gestión empresarial no ha sido "la adecuada" y lamenta que haya que cerrar por la negativa de un banco a renegociar su deuda "millonaria".