Johnson Controls crece en Pedrola. La auxiliar del automóvil, dedicada al ensamblaje de los asientos del Meriva y del Mokka, va a construir una nueva planta en un terreno contiguo a su actual fábrica del polígono El Pradillo para incorporar otra rama de actividad: la fabricación de espumas. Con esta nueva línea de negocio, la compañía prevé crear en un plazo de un año hasta 100 nuevos puestos de trabajo, según indicaron a este diario fuentes sindicales.

Actualmente, la firma se limita a ensamblar los diferentes componentes (la estructura metálica, las espumas, las telas...) que recibe de otros proveedores para suministrar el asiento completo a las líneas de GM España. Así, con la construcción de la nueva fábrica, la empresa realiza una apuesta estratégica --ya no tendrá que adquirir la espuma a otros fabricantes-- y entra de lleno en un mercado con recorrido (según fuentes del sector, solo dos grupos fabrican actualmente este producto en España).

La compañía, que ahora emplea a unas 200 personas, ha decidido dar el paso después de garantizar su futuro durante los próximos siete años gracias a la adjudicación de los asientos de la tercera generación del Opel Meriva y del Citroën C3 Picasso. Previsiblemente, ambos modelos se empezarán a fabricar en la planta de Figueruelas en el segundo trimestre del 2017. Para esas fechas, la nueva factoría de Johnson Controls en Pedrola ya deberá estar totalmente operativa. De hecho, se prevé que las obras, que comenzarán en unas semanas, estén concluidas a finales de este año.

GARANTÍA DE FUTURO

"Estamos contentos porque las recientes adjudicaciones y la nueva planta nos da una estabilidad importante de cara al futuro", destacaron las citadas fuentes. No en vano, el contrato de la tercera generación del Meriva llegaría hasta el 2021 y el del C3 hasta el 2022. Este último modelo podría provocar incluso la instalación de una nueva línea de producción en la factoría de Pedrola.

La construcción de la nueva planta, eso sí, podría afectar a otro fabricante de espumas ubicado en Aragón. Y es que el Grupo Copo, con fábrica en Fuentes de Ebro, es uno de los proveedores de Johnson Controls Pedrola.

Esta factoría no es la única que Johnson Controls tiene en la provincia de Zaragoza. El grupo automotriz, que dentro de unos meses pasará a denominarse Adient, también está presente en Calatorao y en Alagón. En esta última localidad fabrica las armaduras metálicas de los asientos de diferentes modelos de Opel, Renault y Ford, y emplea a unas 500 personas. En Calatorao (en la antigua Keiper) cuenta con unos 100 trabajadores.