El Grupo Lobe, que ha logrado convertirse en la principal constructora aragonesa, prevé alcanzar una cifra de negocio de 520 millones de euros en los próximo cinco años con el desarrollo, ejecución y venta de 2.700 viviendas en Madrid (el 40%), Aragón (30%) y Valencia (30%). Así lo marca el plan estratégico 2016-2020 de la compañía, con el que quiere avanzar en el desarrollo de un nuevo modelo empresarial en su sector, basado en ofrecer productos de alta calidad y avanzar en la industrialización de los procesos constructivos.

"Los tiempos actuales demandan un nuevo formato de organización, distinto al del promotor tradicional, que basaba su beneficio en la gestión del suelo más que en la venta de viviendas", explicó ayer el director general de Lobe, Juan Carlos Bandrés Barrabés, en un encuentro con la prensa con motivo de la convención anual de empleados celebrada en la oficina comercial de la empresa en Zaragoza (Espacio Gran Vía, 24).

Bandrés, que es también el accionista mayoritario de la empresa, expresó su satisfacción con los resultados económicos del 2015. Construcciones Lobe alcanzó una facturación próxima a los 27 millones de euros, un 30% superior a la del ejercicio anterior, mientras que el beneficio neto rondó los 2,2 millones, un 25% más. En paralelo, la plantilla ha crecido hasta los 73 empleos directos que tiene actualmente, frente a los 59 del 2015 y los 41 del 2014.

Como grupo empresarial, incluyendo varias sociedades mixtas con entidades financieras, el volumen de negocio gestionado se acerca a los 180 millones de euros. De esta manera, Lobe, que en el 2017 cumple su 30 aniversario, ha seguido consolidando su expansión a nivel nacional. Actualmente, tiene en desarrollo casi 1.000 viviendas --800 propias y 200 para otros operadores--. De este montante, la mitad de los pisos están ya vendidos.

En Zaragoza, tiene en estos momentos ocho promociones en curso que suman más de 500 viviendas y dos de ellas ya se están entregando: una en Valdespartera-Montecanal (Scenia Residencial I), de 24 viviendas, y otra en Arcosur (Lagos del Sur II), de 72. Tan solo quedan por comercializar cinco unidades de esta última.

RECUPERACIÓN PRUDENTE

Sobre el sector, el director de Lobe consideró que, aunque existe una "recuperación real", persisten ciertas incertidumbres y la demanda sigue siendo baja en un contexto muy competitivo en precios. Para captar al nuevo perfil del cliente, más exigente y desconfiado, Lobe ofrece servicios personalizados para el diseño y equipamiento de la vivienda. "Nuestro producto no es el más barato, pero sí el más potente", asegura. Trabaja asimismo en lograr una calificación de la máxima eficiencia energética para sus edificaciones.