Más de 150 personas trabajan actualmente en las obras de la nueva fábrica de Pikolín en Plaza, una cifra que se duplicará entre abril y junio para esprintar de cara al fin de los trabajos en el mes de septiembre. Tan solo unas semanas después, el grupo iniciará el traslado de su maquinaria con el objetivo de que la planta, en la que va a invertir más de 50 millones de euros, esté totalmente operativa en enero del 2017. Cuando finalice la mudanza, la compañía habrá levantado en la plataforma logística el mayor complejo del sector del descanso de toda Europa, ya que la nueva fábrica se está construyendo junto al almacén que ya ocupa desde el 2011. En total, ambas instalaciones contarán con una superficie cubierta de casi 120.000 metros cuadrados, unos 15 campos de fútbol.

Aunque la obras de la factoría empezaron el pasado verano, fue ayer cuando el grupo celebró la colocación de la primera piedra, un acto al que asistieron representantes de la empresa, así como el presidente de la DGA, Javier Lambán; el alcalde de Zaragoza, Pedro Santisteve; el delegado del Gobierno en Aragón, Gustavo Alcalde, y el Justicia Fernando García Vicente.

Con la construcción de la nueva planta, el fabricante de colchones se enraiza aún más en la comunidad, tal y como destacó ayer el presidente de Pikolín, Alfonso Soláns: "No olvidamos donde están nuestras raíces; estamos en Zaragoza y aquí nos quedaremos para seguir dinamizando la economía aragonesa".

Las nuevas instalaciones, "las más modernas" del sector en Europa, permitirán elevar la productividad y la eficiencia en todos los procesos. Para ello, eso sí, ha sido necesario renovar maquinaria y destinar una fuerte inversión. De hecho, solo en la nueva espumadora, que además de al mercado nacional también podrá suministrar al francés, el grupo ha invertido 18 millones. "También nos aportarán innegables mejoras logísticas, porque tendremos un fácil acceso al ferrocarril, al aeropuerto o al puerto seco", añadió Soláns.

SU CUARTO EMPLAZAMIENTO

La fábrica de Plaza, en la que el grupo seguirá haciendo todas las partes del colchón, las almohadas y los somieres, será el cuarto emplazamiento de la empresa desde su fundación en 1948. Antes de construir en 1973 sus actuales instalaciones de la carretera de Logroño, la firma creada por Alfonso Soláns Serrano inició su expansión en dos locales próximos al puente de Hierro.

El traslado a la plataforma logística, que ha sufrido varios retrasos por la crisis, llega en un buen momento para Pikolín. El grupo facturó el año pasado 392 millones, el 11% más que en 2014, gracias al buen comportamiento del mercado francés, la consolidación en el sudeste asiático y la recuperación del sector en España.

El incremento de la producción permitió que en el 2015 no fuera necesario aplicar ningún día de ERE y que en los últimos meses se hayan realizado diez nuevas contrataciones tras años con la plantilla congelada. Ahora, el grupo emplea en España a 790 personas (626 en Zaragoza).