"Salvo las paredes se ha reformado todo". De esta manera resumía ayer el director general del grupo NH en España, Portugal y Andorra, Hugo Rovira, la importante renovación a la que se ha sometido el Gran Hotel de Zaragoza durante los últimos ocho meses, una reforma integral que "ha hecho renacer" a "uno de los edificios más emblemáticos de la ciudad". Esta joya arquitectónica abrió sus puertas en 1929 y fue promovida por el rey Alfonso XIII. "No hay otro hotel en la capital aragonesa con tanta solera, historia y magia", destacó Rovira. No en vano, este cuatro estrellas ha hospedado a personalidades como Walt Disney, Ernest Hemingway, Ava Gardner, George Sanders o el rey Juan Carlos I.
Tras la renovación, el establecimiento pasa a formar parte del sello NH Collection, la marca 'premium' del grupo hotelero, que incluye edificios "únicos" ubicados "en las mejores localizaciones de las principales capitales". Actualmente, la compañía solo tiene cinco hoteles en España bajo este marchamo: tres en Madrid, uno en San Sebastián y el de Zaragoza.
"Para mí es un cinco estrellas sin ninguna duda", subrayó Rovira, que explicó que el grupo prefiere no optar a esa categoría por una razón de mera estrategia. "Hay muchas compañías que no celebran sus actos en cinco estrellas por política de empresa, y más desde el inicio de la crisis", apuntó el directivo, que recordó que el Gran Hotel ya tuvo esa consideración.
Gracias a la reforma se ha cambiado el mobiliario, los baños, las camas o las televisiones de sus 133 habitaciones y se han renovado los salones y zonas comunes, por lo que la apuesta del grupo ha sido importante. Sin embargo, Rovira no quiso detallar la inversión y se limitó a dar cifras globales. Así, NH va a desembolsar 227 millones de euros entre 2013 y 2018 para relanzar 55 hoteles, 20 de ellos en España.
La Ontina se reinventa
La remodelación también ha permitido reinventar la propuesta gastronómica de La Ontina, el restaurante enmarcado en el establecimiento y que dirige el cocinero Enríque Martínez, galardonado con una estrella Michelin. Por eso se ha creado un gastrobar con una amplia carta de tapas y raciones. "Queríamos seguir siendo gastronómicos, pero también buscar algo más desenfadado e ir a lo que pide la calle", indicó Martínez.
Los tres salones y sus dos salas de juntas hacen del Gran Hotel un espacio "idóneo" para acoger eventos, tal y como destacó su directora Patricia Val. "Entre semana el perfil de nuestro cliente responde más al mercado business y los fines de semana nos concentramos en las celebraciones", dijo Val.
Actualmente, el establecimiento cuenta con una plantilla fija de unas 40 personas, aunque de media emplea a unas 90 personas, una cifra que puede subir dependiendo del evento.
Rovira señaló que el sector comienza a recuperarse en Zaragoza tras unos años duros. "La oferta hotelera en la ciudad era importante", reconoció el directivo, que destacó que el grupo, que tiene cuatro hoteles en la capital, ya vuelve a crecer tras siete años en números rojos.
