Todo comenzó en 1964, cuando la alemana Mann Hummel propuso a la firma zaragozana Talleres Cataluña (Taca), que producía frenos de aire y vasculantes para camiones, crear una fábrica de filtros para automóviles y camiones en España. Julián Laudo, director general de la firma aragonesa, aceptó el reto y en la primavera de 1965 abría sus puertas la planta Taca Mann en el 218 de la avenida de Cataluña. El proyecto fue desarrollado y liderado por José Ignacio Murillo, que por entonces era el ingeniero más joven del país al licenciarse con tan solo 23 años.

Los inicios no fueron fáciles por la baja demanda de filtros del mercado español del automóvil, por entonces en crisis, lo que obligó a la empresa a asumir pedidos "extraños". En este capítulo destacan las 200.000 cocinas de campaña que se fabricaron a finales de los 60 para el Gobierno cubano.

En 1971, Mann Hummel pasó a controlar el 90% de la empresa, rebautizada como Filtros Mann. A partir de entonces llegarían sus años de más esplendor, llegando a ser el mayor productor mundial. En el 2005, abrió su moderna planta de Plaza, donde el éxito le sigue acompañando.