Las bolsas han cerrado con una sesión anodina su mejor semana en varios meses. En el caso de la española, desde julio. La principal razón ha sido la reunión del Banco Central Europeo, al confirmar las expectativas de los inversores de que el programa de compra de deuda se prolongará probablemente más allá de marzo del año que viene, la fecha prevista inicialmente para ponerle fin. Los buenos datos de China y la evolución del petróleo también han contribuido a la mejora. El Ibex 35 ha subido el 3,8% en las últimos cinco días, después de registrar un alza del 0,43% este viernes, hasta los 9.100,4 puntos. La semana que viene, plagada de resultados empresariales, será clave para ver si puede romper la resistencia de los 9.200 puntos.