"No les daré otra oportunidad. El próximo paso en el procedimiento en caso de no recibir una respuesta satisfactoria será lanzar acciones coordinadadas". A la comisaria europea de justicia y protección del consumidor, Vera Jourová, se le ha acabado la paciencia. O Facebook, Google y Twitter toman medidas para corregir los términos y las condiciones que imponen a sus usuarios o empezarán a tomar medidas.

La Comisión Europea y las citadas redes sociales abrieron el diálogo en marzo de este año a raíz de numerosas denuncias de consumidores víctimas de fraudes o estafas al utilizar estas redes sociales. El objetivo clarificar y corregir los términos de uso que, según Bruselas, vulneran la legislación comunitaria en materia de protección de consumidores. El pasado 30 de junio volvieron a pedir por carta ajustes al considerar insuficientes los compromisos asumidos por las tres compañías en relación a la posible limitación de su responsabilidad y les dieron de plazo hasta el 20 de julio para informar sobre las medidas a adoptar.

Dos de las empresas ya lo han hecho y la tercera ha pedido una extensión del plazo hasta el 4 de agosto. Bruselas ha concendido este plazo extra pero Jourová se ha mostrado tajante. "Me estoy impacientando. Seguiremos con el diálogo pero no para siempre. Si no funciona ayudaremos a las autoridades nacionales a lanzar los procedimientos", ha avisado.

Entre las cuestiones que más preocupan a Bruselas, según ha admitido Jourová, el hecho de que los consumidores tengan que acudir a los tribunales de California para resolver cualquier litigio entre ambas partes, que las plataformas no asuman una mayor responsabilidad cuando se cometen fraudes o que los usuarios se vean privados de su derecho a cancelar una compra en línea. "Si quieren hacer grandes negocios utilizando las ventajas de operar en el mercado europeo deben cumplir con los estándares y reglas europeas de protección del consumidor", ha advertido Jourová. Bruselas espera que los cambios estén en marcha para este próximo otoño