La factoría de Opel en Figueruelas ha realizado una inversión de 25 millones de euros en la renovación de la nave de pinturas, un desembolso que ha acometido para mejorar la productividad y la calidad de los nuevos modelos que salen de sus líneas de producción: el Corsa, el Mokka, el C3 Aircross y el Crossland.
En concreto, la nave de pintura se ha modernizado con la instalación de robots de pintado automático, lo que permitirá que el proceso de pintado exterior de las carrocerías se realice únicamente con robots en las cabinas de imprimación, acabado y reparación. «Estos robots se adaptan mejor a la silueta de la carrocería, obteniendo una mejor eficiencia en la transferencia de pintura y reduciendo el residuo», apunta Opel España en su revista corporativa Rodando. Todo ello para fabricar «más vehículos y con mejor calidad en los próximos años», añade la compañía. Además, se han reemplazado las antiguas máquinas de pintado de laca electrostática por robots y se ha completado la reposición de las paredes y la iluminación de las cabinas de pintura (acero inoxidable).
Otro de las novedades ha sido el cambio de los equipos de ventilación en las cabinas de acabado (se han reemplazado seis grupos de aporte y cuatro ventiladores de extracción). Cada equipo de aire suministra 135.000 metros cúbicos por hora. Asimismo, el número de pulverizadores se ha reducido de 18 a solo 8.
RENOVACIÓN INTEGRAL / La renovación la nave de pinturas es un paso más en la profunda metamorfosis que ha sufrido la planta en los últimos meses. La zona de carrocerías, por ejemplo, se ha ampliado con una nueva nave de más de 10.000 metros cuadrados donde se ubicarán hasta 20 líneas de soldadura con la última tecnología y 230 robots. Ello servirá para construir el piso del Crossland X y el C3 Aicross, que se hará en la misma línea del Mokka.
La renovación de carrocerías y la nave de pinturas convierten a las instalaciones de Figueruelas en una de las factorías punteras en el sector. Todo ello para acometer el incremento de la producción prevista para el 2017: unos 450.000 vehículos.
Pero la transformación de Figueruelas ha requerido meses y años de trabajo. La planta es como un ente vivo que se va adaptando a las necesidades del sector y a las nuevas tecnologías y avances. Ya en el verano del 2015 alrededor de 2.000 personas, entre contratistas y personal de la fábrica, trabajaron en la reorganización de las instalaciones. Entonces, la inversión rondó los 44 millones. Así, entre otras mejoras, Opel inyectó 3,5 millones de euros para mejorar en un 25% la productividad global de la zona de prensas y se implantó un nuevo sistema de transporte de materiales.
