El desempleo se redujo en el mes de junio en 98.000 personas, lo que dejó la cifra global de parados en 3,3 millones, un nivel que no se conocía en los últimos ocho años. Las actividades derivadas del turismo, especialmente la hostelería, fueron el motor de la contratación, que alcanzó una cifra récord y dio lugar a estos datos aplaudidos por todos, excepto los sindicatos CCOO y UGT y el PSOE, que se fijaron en la zona de sombra de las estadísticas: el empleo que se crea es muy precario y la protección por desempleo apenas alcanza a la mitad de las personas sin trabajo.

En todo caso, la pujanza del mercado laboral está en una fase de ralentización en lo que llevamos de año. Se mantiene un avance positivo en la creación de empleo y en la reducción del número de parados inscritos en las oficinas públicas pero con menor intensidad que la del 2016. Si en junio la caída del paro ha sido de 98.313 personas, en mayo fue de casi 112.000. Y en junio del 2016 estuvo cerca de los 125.000 parados menos.

Por segundo mes consecutivo el número de contratos superó los dos millones, la inmensa mayoría en el sector servicios, lo que anticipa o es síntoma de otro año récord para el sector turístico, sobre todo en la hostelería más de temporada.

69.650 CONTRATOS AL DÍA

La contratación fue buena pero precaria y con mucha rotación, es decir, con empleos de muy corta duración. Cada día del mes de junio se firmaron cerca de 69.650 contratos de media.

De los más de dos millones de contratos, apenas el 7,97% tuvo carácter indefinido, lo que alcanza a solo 166.462 contratos. De este total, la inmensa mayoría (99.033) fueron a tiempo completo y el resto (67.429) a tiempo parcial.

En lo que llevamos de año se han efectuado más de 10,5 millones de contratos en el conjunto del país, un 11% más que en el mismo periodo del 2016. De esta cantidad, un total de 964.839 fueron contratos fijos.

Dado que el empleo que se crea se da mayoritariamente en la hostelería, se podría pensar que son los jóvenes los que más dejan las listas del desempleo para convertirse en ocupados. Sin embargo, no es así. Entre los menores de 25 años el paro ha caído en 17.171 personas, pero entre los mayores de 25 años, la bajada ha alcanzado a 81.146 trabajadores.