El precio de la energía en los hogares españoles es uno de los más altos de la Unión Europea (UE), según un informe publicado ayer por la oficina estadística europea, Eurostat, sobre energía, transporte y medio ambiente en los Veintiocho.

Según el estudio, España tiene el quinto precio más elevado de la UE de electricidad de consumo doméstico, con 0,237 céntimos por kilovatio hora en el 2015, solo superado por el de Dinamarca, Alemania, Irlanda e Italia.

Si se introduce la variable del poder adquisitivo de cada país, que compara el precio de otros productos con el de la energía, España tiene la cuarta energía más cara, y Portugal, Alemania y Rumanía ocuparían los tres primeros puestos de la lista.

Algo similar ocurre con gas natural, que tiene en España el tercer precio más alto de la UE, por detrás de Suecia y Portugal. H